viernes, 14 de enero de 2011

The Mellizo Strikes back

Volvió el hijo prodigo. El que faltaba retornar. Su club de toda la vida clama por él porque en él ve ilusión.

A diferencia de otros jugadores, que cambian el sentimiento rápidamente, como Palermo, que nunca volverá a su club y se retirará a fin del Clausura en Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto puso el pecho y decidió afrontar una de los peores momentos del Gimnasia desde adentro de la cancha.

Muchas eran las críticas que recaían sobre el Mellizo cuando este no pegó la vuelta en las 6 oportunidades anteriores en que lse lo llamó para reflotar al naufragio y, se sospechaba, que no quería volver por miedo a quemarse con una mala campaña. Sin embargo, esta vez se dio el objetivo tan ansiado y Guillermo volvió al club de sus amores en un momento tanto más crítico que en esas oportunidades.

Ningún jugador puede hacer jugar a un equipo él solo. Pero Guillermo puede aportar su experiencia y su astucia en favor del Lobo. como el Gato Sessa, el Mellizo es pasión. Una pasión tripera e inigualable.